
A través de los cinco sentidos experimentamos la vida, son ventanas al mundo. Practicar con ellos es la base del aprendizaje y asimilar los estímulos que captan es cultivar la sabiduría. Los cinco son un regalo, pero hay uno especialmente poderoso, pues sobre él podemos intervenir.
Pocas veces logramos cambiar lo que vemos, oímos, olemos y sentimos a través de la piel. Esa vivencias nos llegan sin querer, nos sorprenden y eso les da importancia.
Así, necesitamos ver para creer, tocar para poseer, oír para situarnos y oler para reconocer. Pero el gusto es nuestro, aunque ¿cuántas veces pasamos por alto el poder de la boca? Y eso que el buen o mal gusto depende de ella.
Reír o gruñir, cantar o criticar, susurrar o gritar, hablar o censurar. Perder el gusto en todos los sentidos, es perder un poco de nosotros mismos.
Somos lo que comemos, lo que decimos, lo que callamos, lo que besamos.
Me dan pena toda la gente que tiene manías alimenticias exageradas, que no le gusta esto o aquello.
ResponderEliminarHay que saber apreciar lo bueno de los sabores, olores, la belleza de las imágenes o de los sonidos, el placer de la música y, ¡cómo no!, el disfrute de una caricia.
Besos
Pues tienes razón.
ResponderEliminarUn gusto pasar por aquí.
Besos.
Llevas mucha razón...Somos lo que callamos, somos lo que besamos.
ResponderEliminarMuchos besos.
El gusto es algo muy personal, y por suerte no todos tenemos el mismo gusto, un beso.
ResponderEliminarHola mi querida amiga, según las escrituras Jesús dijo:"No es, lo que entra en la boca del hombre lo que contamina, sino lo que sale de ella", El gusto, la boca son algo maravilloso, pero puede convertirse en arma de doble filo, tenemos un sexto sentido, para orientar los restantes por un buen camino, interesante post, me es grato venir a visitarte. Te dejo un abrazo para que sientas en tu piel el calor del sol y el frio de la luna.
ResponderEliminarAyyy.. qué bien lo has contado... y qué de placeres nos estamos perdiendo!!!!
ResponderEliminarUn besote.
Amén a tus plabras querida amiga....somos lo que queremos ser....
ResponderEliminarUn abrazo y recoje de mi blog el premio Amistad.
Muy hermoso. Gracias a los sentimientos de los besos podemos sentirnos vivovos y transmitir toda nuestra energía a otra persona,através de los labios de corazón a corazón.
ResponderEliminarPues la verdad que nunca lo había pensado así.Quizás el gusto sea el más olvidado de todos los sentidos unicamente usado cuando se comete el bendito pecado de la gula... aunque en la lujuria también tenga su importancia.
ResponderEliminarBessets.
Somos un conjunto de sensaciones, mezcladas no agitadas,jaja.
ResponderEliminarUn beso, guapa
Natacha.
Cuanta razón tienes!
ResponderEliminarY el gusto es mío ;)
y si de algo soy experta es aprobechar los 5...5?jaja, en aprobecharlos al máx.
Un enorme beso!
LLevas razón, Myself,el gusto es tuyo y de como lo expresas haces que quiera también participar en el.
ResponderEliminarUna forma muy interesante de expresar lo que sentimos, saboreamos y tambien besamos pues ahora el gusto es mío.
M
Sí es verdad la boca nos produce tantos sentires, como la magia de un beso en la frente de nuestros seres amados.
ResponderEliminarSalud-os desde mi suspiro Otoñal.
Ciertamente que, como se suele decir, lo que no se practica se atrofia. El gusto es un elemento clave dentro de la boca, donde pueden salir tanto palabras de amor profundo como de odio rotundo.
ResponderEliminarPor eso es que se insiste tanto en que midamos nuestras palabras. Saludos afectuosos, de corazón.